LITORAL DESEADO.
Los encuentros bélicos siempre traen consecuencias nefastas para los Estados en disputa, denigran las relaciones diplomáticas y constituyen un atraso o un alto en los avances de las naciones. Si mencionamos la Guerra del Pacífico, nos trae a la memoria la destrucción tanto material como anímica de nuestro país, así mismo la ocupación de territorios de Perú y Bolivia, perjudicando también a éste último convirtiéndolo en un país mediterráneo, es decir, sin litoral marítimo. Algo más de un siglo después de este funesto episodio de nuestra historia los altiplánicos reclaman su acceso al mar, ya sea por vía peruana o chilena; su presidente Carlos Mesa trata de reinvidincar a su población después de la crisis social que tuviera con motivo del gas boliviano, un buen regalo para ellos sería la salida al mar.
Es cierto que Alsacia y Lorena regresaron a Francia después de estar en manos de Alemania, así como el canal de Panamá regresó al mismo Panamá después de estar bajo el poder norteamericano, es necesario (previo acuerdo) que los bolivianos tengan soberanía marítima pero utilizando territorio chileno, esos que se dejaron arrebatar durante el período de la Guerra del Pacífico, en consecuencia Tarapacá y Antofagasta serían las vías hacia el Pacífico. Porque si se piensa que el Perú ceda algún espacio par esta salida creo que se equivocarían nuestras autoridades al hacer este supuesto respaldo. Los países vecinos de Ecuador, Colombia, Brasil y Chile nos han arrebatado territorios, sólo faltaría que los peces se armen militarmente y se enfrenten a nuestras fuerzas armadas con el objetivo de apoderarse de nuestra zona costera, sería lo único que nos faltaría. Es por eso, si Bolivia quiere tener aguas saladas debe ser por Chile, este país le quitó esa gran riqueza que ellos, o sea los bolivianos, no pudieron defender; y ahora quieren obtener por vía diplomática, sería un absurdo carajo si nuestras autoridades den la venia a este pedido, el Perú no debe ceder parte de su riqueza geográfica, ¡no señores!.
Es cierto que Alsacia y Lorena regresaron a Francia después de estar en manos de Alemania, así como el canal de Panamá regresó al mismo Panamá después de estar bajo el poder norteamericano, es necesario (previo acuerdo) que los bolivianos tengan soberanía marítima pero utilizando territorio chileno, esos que se dejaron arrebatar durante el período de la Guerra del Pacífico, en consecuencia Tarapacá y Antofagasta serían las vías hacia el Pacífico. Porque si se piensa que el Perú ceda algún espacio par esta salida creo que se equivocarían nuestras autoridades al hacer este supuesto respaldo. Los países vecinos de Ecuador, Colombia, Brasil y Chile nos han arrebatado territorios, sólo faltaría que los peces se armen militarmente y se enfrenten a nuestras fuerzas armadas con el objetivo de apoderarse de nuestra zona costera, sería lo único que nos faltaría. Es por eso, si Bolivia quiere tener aguas saladas debe ser por Chile, este país le quitó esa gran riqueza que ellos, o sea los bolivianos, no pudieron defender; y ahora quieren obtener por vía diplomática, sería un absurdo carajo si nuestras autoridades den la venia a este pedido, el Perú no debe ceder parte de su riqueza geográfica, ¡no señores!.
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carlos -
CiberEspia -
Pepe -